La gobernadora Kate Brown declaró el viernes el Estado de Emergencia para la ciudad más grande de Oregón, alegando que "grupos de supremacía blanca" viajaban desde fuera del estado para asistir a un evento que los Proud Boys han organizado para "terminar con el terrorismo doméstico", del que, sarcásticamente, ellos son los promotores.

Los líderes locales y estatales dijeron en una carta a la comunidad que muchos participantes han discutido abiertamente las operaciones tácticas y las formaciones de tipo militar y planean causar caos y violencia mientras afirman estar actuando en apoyo de la policía.

"El evento representa un peligro físico para los residentes de Portland, como lo demuestra claramente el largo historial de asaltos, enfrentamientos y amenazas de los organizadores contra los funcionarios electos y la ciudadanía de Portland", dice la carta.

"Afirmamos claramente, una vez más, que las fuerzas del orden no quieren ni necesitan ayuda de los paramilitares o grupos de vigilancia".

El presidente Donald Trump, que ha hecho de la ley y el orden un tema principal de su candidatura a la reelección, ha señalado a Portland como una de las varias ciudades dirigidas por los demócratas que denuncia como "jurisdicciones anarquistas" a las que se les debería recortar la financiación federal.

Su contrincante demócrata, el ex vicepresidente Joe Biden, dijo que la retórica de Trump estaba avivando la violencia.

El autoproclamado grupo "chovinista occidental" Proud Boys ha publicado acerca de esta protesta en Facebook durante semanas, a pesar de la promesa de la red social de bloquear tales páginas, según las imágenes proporcionadas por el Proyecto de Transparencia Tecnológica visto por la agencia Reuters. Facebook dijo el viernes que había eliminado las páginas.

Los Proud Boys, que son defensores de los pro-derechos de portar armas sin restricción alguna, denuncian públicamente la violencia, pero los miembros que llevan camisetas negras y amarillas de marca a menudo se pelean con oponentes de izquierda en los mítines.

Portland se ha convertido en un imán para los contra manifestantes de derecha tras cuatro meses de manifestaciones antifascistas y de Black Lives Matter contra la violencia policial y el racismo.

Los enfrentamientos entre la izquierda y la derecha se han intensificado en todo el territorio de los Estados Unidos desde mediados de agosto, cuando un antifascista autoproclamado mató a tiros a un miembro derechista de Patriot Prayer en Portland el 29 de agosto, después de que un vigilante (paramilitar) adolescente matara a dos manifestantes e hiriera a otro en Kenosha, Wisconsin, el 25 de agosto.

Facebook y otras plataformas en línea como Parler han estado llenas de llamadas a los manifestantes para que se armen y hablen salvajemente de guerra civil, según las páginas monitoreadas por Reuters.

En su carta a la comunidad, los líderes locales y estatales dijeron que durante tres años Portland ha tenido que soportar mítines como el planeado para el sábado, con participantes que amenazan con "tomar el control" de la ciudad y pregonan su capacidad de "unidad de combate".

En la carta se decía que las actividades paramilitares y de ultraderecha eran un desafío a los valores inclusivos y democráticos de Portland, pero que los líderes de la ciudad y del estado no se dejarían intimidar.

"Portland tiene una larga y orgullosa historia de oponerse a la extrema derecha organizando y defendiendo las vidas de los negros en la Ciudad Rosa, y el sábado no será diferente", decía la carta.

Bajo la declaración de emergencia de Brown, un grupo de trabajo de la policía estatal y local está autorizado a usar "fuerza proporcional", incluyendo gas lacrimógeno, para mantener la paz.

Los Proud Boys se reunirán al mediodía en el Parque Delta, a unas 6 millas al norte del centro de la ciudad. Los grupos de izquierda realizarán una contra-protesta a unas 2 millas de distancia. La policía pretende mantenerlos separados.

El grupo masculino de los Proud Boys se describe como una organización fraternal que es "antirracista" y "anti-política correcta".

El grupo de derechos civiles Centro Legal de la Pobreza del Sur (SPLC) clasifica a los Proud Boys como un grupo de odio, citando la retórica anti-musulmana y misógina de sus miembros.