Notablemente, sin embargo, a pesar de esta línea de tiempo acelerada, Barrett salió relativamente ilesa de sus audiencias de confirmación. Esto es una gran hazaña considerando tanto la naturaleza partidista de las audiencias como las preguntas inminentes sobre si la prisa para confirmarla ponía en peligro la legitimidad del Tribunal.

La confirmación de Barrett también es increíblemente importante, ya que probablemente desplazará el centro de gravedad del Presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, hacia el borde derecho del ala conservadora del Tribunal, lo que podría dar lugar a fallos que están significativamente fuera de la corriente principal de la opinión pública.

Tampoco tendremos que esperar mucho para ver cómo gobierna Barrett. Ella se enfrenta a una serie de casos candentes desde el principio, incluyendo una disputa sobre exenciones de libertad religiosa, un desafío a la Ley Obamacare y varios casos relacionados con las polémicas políticas de la administración de Trump, sin mencionar las peleas electorales que llegarán a la Corte en las próximas semanas, además del hecho de que Mississippi recientemente pidió a la Corte Suprema que considerara su prohibición del aborto de 15 semanas, lo que desafía directamente la resolución del caso Roe vs. Wade.

Por qué Barrett está lista para rehacer la Corte Suprema

Como hemos escrito antes, es difícil saber exactamente cómo un nominado a la Corte Suprema dictaminará hasta que realmente juren y empiecen a sopesar en los casos. Pero tenemos datos sobre los tres años de Barrett como juez del 7º Circuito de la Corte de Apelaciones de los EE.UU., y como pueden ver en la tabla de abajo, era muy conservadora.

Se analizaron por separado su historial judicial de la Corte de Apelaciones durante este mes, y nos encontramos que, si bien expresó opiniones regulares o en las decisiones especiales en el asiento de magistrados en las que toda la corte de apelaciones dictaminó en conjunto, siempre fue consistente con el espíritu del Derecho, aunque si no más bien se podría catalogar como una jueza muy conservadora en su asiento judicial. Lo cierto es que era especialmente probable que fallara en la dirección conservadora acerca de los temas de derechos civiles.

Esos hallazgos subrayan la idea de que Barrett probablemente vaya a ser un voto conservador fiable en el Tribunal Superior. Y su confirmación es aún más significativa porque está reemplazando a uno de los liberales más incondicionales de la Corte, la Jueza Ruth Bader Ginsburg. Si Barrett termina siendo ideológicamente similar al Juez Samuel Alito, quien es actualmente el segundo juez más conservador de la Corte Suprema, su reemplazo de Ginsburg podría ser uno de los mayores cambios ideológicos en la historia de la Corte moderna.

En este escenario, el Juez Brett Kavanaugh reemplazaría a Roberts como el nuevo juez medio de la Corte, lo que podría llevar a un significativo giro hacia la ideología de la derecha dentro de la Corte, ya que Roberts es a menudo el único juez conservador que está del lado de los liberales. También ha emitido recientemente varios votos decisivos junto a los liberales, incluida una disputa en la que los jueces llegaron a un punto muerto de 4-4 sobre si detener una decisión del Tribunal Supremo de Pensilvania que permitía a los funcionarios estatales contar las papeletas que llegaban hasta tres días tarde. Sin embargo, con Barrett en el Tribunal, Roberts perdería ese papel de "juez oscilante".

A corto plazo, eso significa que los casos relacionados con las elecciones podrían tener resultados muy diferentes, incluyendo una nueva iteración del caso de Pennsylvania, que los funcionarios republicanos llevaron recientemente a la Corte. Y a largo plazo, los defensores jurídicos conservadores podrían responder presentando casos aún más ambiciosos, cuestionando los precedentes de larga data.

Las audiencias podrían haber sido mucho peores para Barrett, y para el Tribunal

La idea de confirmar a alguien para reemplazar a Ginsburg antes de las elecciones presidenciales fue, políticamente, bastante impopular tan hace sólo unas semanas. Si bien es cierto que la mayoría de las audiencias de confirmación de la Corte Suprema son bastante partidistas en estos tiempos, alrededor del momento en que Barrett fue nombrada como la favorita al Tribunal, la mayoría de los estadounidenses dijeron que querían que el ganador de la elección eligiera al siguiente juez. Y las encuestas de The Economist a mediados de octubre también encontraron que Barrett era la nominada más impopular en la historia de la Corte Suprema.

Ahora, sin embargo, los estadounidenses pueden haber aceptado la idea de que Barrett se una a la Corte antes del día de las elecciones. Según los sondeos de Morning Consult, el apoyo a la confirmación de Barrett subió del 37 por ciento cuando fue nominada al 51 por ciento después de que las audiencias terminaran, y una encuesta de Gallup realizada durante la confirmación de Barrett se encontró con datos similares.

Cabe destacar que, según esa encuesta de Gallup, esta cifra era sustancialmente superior a la parte que quería que el Senado confirmara al juez Brett Kavanaugh en 2018 (41 por ciento), y es incluso ligeramente superior al apoyo que han recibido en promedio los anteriores nominados desde 1987 (48 por ciento).

La confirmación de Barrett no fue tan divisiva

Una parte de los estadounidenses que dijo estar o no a favor de que el Senado confirme a cada nominado a la Corte Suprema

Nominado                           A favor        -No a favor      -Ninguna opinión

Amy Coney Barrett                     51%                    46%                    3%

Brett Kavanaugh                          41                      37                      22

Neil Gorsuch                                45                     32                       23

Merrick Garland                          52                      29                      19

Elena Kagan                                46                      32                       22

Sonia Sotomayor                        54                       28                       19

Samuel Alito                               50                      25                       25

Harriet Miers                              44                       36                       20

John Roberts                               59                      22                       19

Ruth Bader Ginsburg                 53                       14                       33

Clarence Thomas                       52                       17                       31

Robert Bork                               31                       25                       44

Promedio de los

nominados anteriores               48                         27                      25

No se disponía de datos sobre los jueces Stephen Breyer, David Souter, Anthony Kennedy y Douglas Ginsburg.

Para estar seguros, esto no significa un apoyo universal para la confirmación de Barrett. La opinión partidaria sobre su confirmación está realmente dividida, según Gallup, sólo el 15 por ciento de los demócratas querían que el Senado votara para confirmarla, por ejemplo. Una profunda división partidista en el apoyo no es una buena señal para la Corte en general tampoco, ya que puede reforzar la percepción de que la Corte es en sí misma una institución partidista. Pero Barrett podría haber salido como menos popular de su audiencia, por lo que el nivel de apoyo que ella disfruta es bastante notable, especialmente si se considera que la mayoría de los estadounidenses están de acuerdo en que ella empujaría a la Corte hacia la derecha (54 por ciento en esa encuesta de Morning Consult).

Barrett se enfrentará a casos muy controvertidos inmediatamente

Barrett también podría enfrentarse inmediatamente a decisiones difíciles, incluyendo la votación sobre el destino de los plazos de las votaciones en varios estados. También están en juego varios casos importantes que incluso alteran los precedentes, y considerando que el tribunal de Roberts ya ha estado derribando más precedentes con ligeras mayorías de 5-4 que cualquier otro Tribunal en la historia moderna, esa tendencia podría acelerarse aún más con Barrett en el tribunal.

El día después de la elección, por ejemplo, los jueces escucharán un caso en el que se les pide que reconsideren un precedente de 30 años de libertad religiosa. En ese caso, los jueces considerarán si ese precedente dificulta que los religiosos demanden exenciones. La opinión de la mayoría en ese caso que sienta precedente, División de Empleo vs. Smith, fue redactada por el difunto juez conservador Antonin Scalia, pero cuatro de los actuales jueces conservadores ya han señalado que podrían estar dispuestos a anularlo. Barrett podría anularlo y facilitar que las disposiciones de no discriminación sean cuestionadas por los litigantes religiosos.

Y una semana después de las elecciones, un caso que involucra la constitucionalidad de la Ley de Obamacare llegará a la Corte, en el cual los jueces podrían declarar inválida toda la Ley. Otra señal importante será si la presencia de Barrett en la Corte da a los conservadores un cuarto voto para escuchar un caso que involucra la prohibición del aborto de 15 semanas en Mississippi, que el fiscal general del estado describió como un "vehículo ideal" para "aclarar" cómo deben interpretarse los precedentes de la Corte sobre el aborto. También hay varias políticas importantes de la administración Trump en el expediente un poco más tarde en este término, incluyendo el intento de la administración de excluir a los ciudadanos indocumentados del recuento del censo utilizado para la redistribución de distritos, y si Trump se apropió inconstitucionalmente del poder del Congreso cuando desvió fondos del Departamento de Defensa para ampliar el muro fronterizo con México. Dado que varias decisiones recientes de la Corte Suprema sobre las políticas de la administración Trump -incluido un intento de añadir una pregunta sobre la ciudadanía al censo de 2020-, se dividió con votos 5-4, con Roberts que emitió un voto decisivo con los liberales en contra de la administración Trump, y ahora la presencia de Barrett en la Corte podría hacer más probable una decisión a favor de Trump.

Barrett pasó por sus audiencias de confirmación casi sin controversia, pero veremos si esa complacencia durará. No llevará mucho tiempo hacerse una idea de hasta dónde están dispuestos a llegar los conservadores de la Corte Suprema ahora que tienen una mayoría decisiva por primera vez en décadas.