Mientras el presidente electo Joe Biden felicitaba a los científicos de Pfizer y sus encomiables esfuerzos, el presidente Trump tomó el crédito para sí publicando un tuit con letras mayúsculas:

"EL MERCADO DE VALORES SUBIÓ EN GRANDE, UNA VACUNA VENDRÁ PRONTO. SEGÚN REPORTES, ES 90% EFECTIVA. ¡SON GRANDES NOTICIAS!"

El vicepresidente Mike Pence también corrió a agenciarse este triunfo científico, tuiteándo:

"GRANDES NOTICIAS: Gracias a la alianza público privada forjada por el presidente @realDonaldTrump, @pfizer ha anunciado que la vacuna prueba contra el coronavirus es EFECTIVA, previniendo la infección en un 90% en los voluntarios"

La hija del presidente, Ivanka Trump, también hizo eco de la noticia, afirmando falsamente en Twitter que "gracias al incansable trabajo de la "Operación Warp Speed" y la alianza con Pfizer, HHS y el Ejército, Pfizer puede fabricar vacunas a gran escala..."

El único pequeño problema con esta narrativa de Administración Trump es la propia compañía Pfizer, quien negó que Trump y los fondos de su Programa fallido "Operación Warp Speed" hayan tenido lugar en las investigaciones y posterior logro de la vacuna.La Operación Warp Speed, el esfuerzo federal para llevar una vacuna al mercado, ha prometido a Pfizer 1.950 millones de dólares para entregar 100 millones de dosis al gobierno federal, que serán entregadas a los americanos de forma gratuita.

Pero la Dr. Jansen distanció a la compañía de la Operación Warp Speed y de la política presidencial, señalando que la compañía -a diferencia de los otros líderes en vacunas- no tomó ningún dinero federal para ayudar a pagar la investigación y el desarrollo. Pfizer también quiso apartarse del recelo anti-científico de los hombres políticos del presidente saliente.

"Nunca fuimos parte de la Warp Speed", dijo. "Nunca hemos tomado ningún dinero del gobierno de los Estados Unidos, ni de nadie."

Dijo que se enteró de los resultados por el panel externo de expertos poco después de la 1 p.m. del domingo, y que el tiempo no fue influenciado por la elección.

"Siempre hemos dicho que la ciencia está dirigiendo la forma en que nos comportamos, no la política", dijo.

Los datos publicados por Pfizer el lunes fueron entregados en un comunicado de prensa. No son pruebas concluyentes de que la vacuna sea segura y eficaz, y el hallazgo inicial de más de 90 por ciento de eficacia podría cambiar a medida que avance el ensayo.

"Necesitamos ver los datos reales y vamos a necesitar resultados a largo plazo", dijo Jesse Goodman, profesor de medicina y enfermedades infecciosas de la Universidad de Georgetown. Aún así, dijo, "es un testamento al trabajo duro y a la ciencia que estamos obteniendo resultados tan buenos y tan rápidos".

Otros científicos se quedaron atónitos con los datos hasta ahora.

"Este es realmente un número espectacular", dijo Akiko Iwasaki, inmunólogo de la Universidad de Yale. "No esperaba que fuera tan alto. Me estaba preparando para algo así como el 55 por ciento."

Si la vacuna final termina con ese nivel de eficacia, "sería más alta que su vacuna contra la gripe regular, y esta vacuna podría tener un serio impacto en doblar la curva de este brote", dijo el Dr. Saad B. Omer, director del Instituto de Salud Global de Yale.

Y definitivamente, este es un logro más de la ciencia y ni Trump ni su administración deben agenciarse el esfuerzo de los cientificos por lo que no han trabajado, ni remotamente.