Pero la orden ejecutiva, que entra en vigor inmediatamente, también prohíbe a los gobiernos locales cerrar negocios o cobrar multas relacionadas con los mandatos relacionados con la pandemia, como los requisitos de uso de mascarillas.

"Hoy estamos pasando a lo que inicialmente llamamos la Fase 3", dijo DeSantis durante una conferencia de prensa en San Petersburgo. "Y lo que eso significará para los restaurantes es que no habrá limitaciones por parte del estado de Florida".

"También estamos diciendo que en el estado de Florida todos tienen derecho a trabajar", añadió. "(Los gobiernos locales) pueden hacer regulaciones razonables pero no pueden decir simplemente que no."

Sin embargo, la senadora demócrata Linda Stewart llamó a la medida un recurso político y cuestionó si era el momento adecuado de reabrir, ya que Florida sigue teniendo una tasa de mortalidad relativamente alta y una tasa de positividad en comparación con el resto del país.

"No estoy muy convencida de que estemos listos para esto ahora mismo", dijo Stewart, (D-Orlando). "Y si el gobernador quiere avanzar de esta manera, en tres semanas sabremos si estamos listos."

Hay cuatro disposiciones principales de la orden:

-Elimina todas las restricciones estatales restantes sobre los negocios, incluyendo bares y restaurantes, que se limitaron al 75% de la capacidad en la Fase 3 del plan original de reapertura de DeSantis.

-Proporciona un derecho general a trabajar y a operar un negocio. Los gobiernos locales pueden limitar y regular los negocios, pero no podrán cerrar los negocios debido a las preocupaciones por el coronavirus.

-Los gobiernos locales no podrán evitar que los restaurantes operen por debajo del 50% de su capacidad. Bajo órdenes anteriores, los gobiernos locales podían ir más allá de las restricciones a nivel estatal, y los condados del sur de Florida mantuvieron cerrados los restaurantes y bares después de que el estado les permitió reabrir. Además, las ciudades y condados no podrán imponer ninguna restricción sin una justificación económica y sanitaria.

-Las ciudades y condados no pueden cobrar ninguna de las multas pendientes que emitieron como parte de su respuesta a la pandemia. La orden, sin embargo, no obliga a los gobiernos locales a reembolsar a nadie que ya haya pagado una multa.

DeSantis dijo que la orden no afecta a las instalaciones deportivas y parques temáticos porque no hay restricciones impuestas por el estado en la actualidad, pero cada empresa tiene la capacidad de imponer sus propios requisitos de distanciamiento y enmascaramiento.

El grupo de trabajo de emergencia del Condado de Seminole, compuesto por el presidente de la comisión, Jay Zembower, el director de gestión de emergencias Alan Harris y el director médico Todd Husty, dijo que se reunirán el viernes para discutir cómo la nueva orden estatal afecta a la orden ejecutiva del Condado de Seminole, que requiere que los individuos usen mascarillas en público y que los violadores recurrentes se enfrenten a un cargo de delito menor.

"Estamos revisando nuestras órdenes y esperando a que el gobernador emita una guía por escrito", dijo Ashley Moore, una portavoz del condado de Seminole. nuestras órdenes y esperando a que el gobernador emita una guía po

Un empresario seminolés, Vishal Chunilal, de Oviedo Brewing Co., dijo que tenía sentimientos encontrados sobre la decisión. Dijo que era genial volver a empezar ccomo en los viejos buenos números pre-coronavirus, pero la seguridad es más importante.

"Primero miro a mi personal, a mí y a mi familia", dijo Chunilal.

Añadió que está esperando la respuesta del gobierno local antes de comenzar su plan.

El viernes se reportaron 2.815 nuevos casos, junto con 162 muertes, lo que eleva los totales de Florida desde que comenzó la pandemia en marzo a 695.887 casos y 13.915 muertes. Hasta el jueves, había 2.169 personas hospitalizadas con el coronavirus en el estado, por debajo del pico de más de 9.000 a fines de julio.

Pero el promedio de casos diarios de esta semana también ha aumentado un 5% desde hace dos semanas, informó el New York Times. Florida también tiene una tasa de positividad del 4,29% en comparación con el 1% de Nueva York, aunque varios estados del Medio Oeste estaban viendo tasas de dos dígitos.

DeSantis también dijo que aunque la pandemia no ha terminado, la sociedad debe continuar funcionando incluso cuando los ciudadanos tomen medidas para prevenir su propagación.

"El hecho de que continúen avanzando con la economía, no significa que el virus desaparezca", dijo DeSantis. Pero imponer cierres "donde la sociedad se tambalea, la gente está sin trabajo, los niños no están en la escuela, eso no va a funcionar, y ese no es el camino a seguir para nosotros".

Pero los críticos de la medida dijeron que la prevalencia del virus era aún demasiado alta para que el DeSantis eliminara todas las restricciones.

"Algunos de los principales economistas del país le han dicho al gobernador DeSantis en términos muy claros que la economía no se recuperará hasta que tenga el virus bajo control", dijo Sydney Reiss, becaria de salud pública del capítulo de Florida del Grupo de Investigación de Interés Público, un grupo nacional de interés y por la defensa del consumidor. "Sin embargo, el gobernador está impidiendo restricciones que podrían salvar vidas, mientras que los casos de COVID-19 siguen estando muy por encima de los niveles que los profesionales de la salud consideran seguros para su reapertura".

Stewart también dijo que no estaba "tan convencida de que las estadísticas [sobre el coronavirus] estén siendo reportadas de manera precisa".

"Espero que lo estén ... No creo que debamos jugar a la política con la salud pública".

Chunilal también piensa lo mismo y espera que su cervecería, que también ofrece comida, amplíe el número de personas permitidas en el interior en etapas y no vaya directamente al 100% de su capacidad.

"Tendremos un plan de acción para llegar al 100%, pero no será inmediato", dijo Chunilal.

Más adelante, el Willow Tree Café de Hollerbach, en el centro de Sanford, planea reducir su capacidad a 665 asientos, y su propietaria Christina Hollerbach espera llegar al 100% de su capacidad en marzo. Está operando con unos 280 a 300 asientos en este momento.

El restaurante alemán, que ahora funciona con unos 90 empleados, necesita contratar de 15 a 30 personas en los próximos seis meses, dijo Hollerbach.

Hollerbach's estaba terminando una expansión con cientos de nuevos asientos y una cervecería en la azotea cuando comenzó la pandemia. El restaurante despidió a más de 50 personas en marzo mientras mantenía a otras 50 en la nómina, antes de finalmente devolver su personal a 90 empleados.

Hollerbach añadió que no espera que las máscaras, la desinfección o el distanciamiento social desaparezcan inmediatamente.

"Me alegro de que el Gobernador confíe en que los propietarios de restaurantes sean responsables para que podamos restaurar una buena economía y devolver los puestos de trabajo", dijo Hollerbach.

Los ayudantes de DeSantis dijeron que la orden se basaba en parte en la reducción de hospitalizaciones, nuevos casos y muertes por COVID-19 desde que el estado fue golpeado por una oleada del virus en el verano.